Queda menos para ser una princesa

miércoles, 20 de mayo de 2009

Capitulo I: De cuando la báscula te posee


Sé que no debería, que en el fondo cada vez que veo esos números mi autoestima baja más. Pero no lo puedo remediar. Cada vez que paso por la puerta del baño, ella me desafía. Me pide que suba para reirse de mí y con ese 65 estático me recuerda que todo mi esfuerzo no es suficiente. Me levanto por la mañana y me peso. Normalmente he bajado unos gramos del peso anterior. A la hora de haberme levantado, me vuelvo a pesar, a veces sonrio y salto, a veces agacho la cabeza y no entiendo qué es lo que ha pasado. Y por la noche, antes de irme a dormir, otra vez... Y me arrepiento de haber comido ese trocito de pan. ¿Soy una esclava de la báscula? es posible, y quizá tenga que ponerle remedio. ¿Y tu? ¿eres una esclava de la báscula?...

3 comentarios:

  1. Hola! qué lindo template el de tu blog

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  2. Nena, wapisimo tu blog
    y bueno por eso mismo que te pasa, en mi casa no tengo bascula...
    Lo malo es que cada vez que voy a casa de mi novio me peso.. estonces me pasa como a ti, a veces me sonrio pensando "que bien he bajado" y otras tanto esfuerzo para solo bajar un kilo?

    pero bueno
    un beso wapis!

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  3. nena, describiste mi "esclavitud" pero entendi q solo t estresa, trata de pesarte dos veces al dia y despues 1...altera tus nervios y al final todo sale de otra manera.. ::

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